El refrán al que no quiere caldo se le dan dos tazas es una expresión popular utilizada para referirse a alguien que rechaza una cosa pero acaba recibiendo aún más de lo que rechazó en un principio.
En otras palabras, este refrán nos dice que cuando alguien rechaza algo, es posible que acabe recibiendo más de lo que esperaba o deseaba. Puede interpretarse como una advertencia de que, a veces, es mejor aceptar una situación desde el principio para evitar consecuencias que puedan ser aún peores.
Es un recordatorio de que la resistencia a aceptar algo puede llevar a que la situación empeore en lugar de mejorar. Por lo tanto, es importante reflexionar sobre las decisiones que tomamos y considerar si es mejor aceptar lo que se nos ofrece en lugar de rechazarlo por completo.